miércoles, 2 de julio de 2014
Experiencia 1
Hice el curso hace casi un año y esta fue mi experiencia:
Cuando me apunté al curso me llamaron mucho la atención el tema de las prácticas, porque otros cursos no las daban. Yo seguía a María desde hacía bastante, cuando trabajaba en Tele5 y es cierto que me gustaba mucho su trabajo. Por eso, cuando surgió la oportunidad de hacer el curso, no lo dudé. No me planteé si sería buena profesora. Sabía que era buena maquilladora, y con eso me bastaba.
En todo momento aseguró varias veces que habría prácticas en televisión y revistas. Así que me di el capricho (o caprichazo) y empecé el curso.
Ya el primer día nos dijo que teníamos que ir a MAC a comprar una serie de productos que íbamos a usar a diario en clase. Aparte, si no tenías brochas y pinceles de calidad, te recomendaba también la manta de MAC. El día que fuimos todas, ilusionadas, cegadas, a MAC a comprar, aprovechando "su descuento" es normal que cayeran muchas más cosas.
También en su primera clase te da la clave de cual es su objetivo en todo el curso, pero en ese momento no te das cuenta. Y es que ella quiere irse a Miami a trabajar y palabras textuales, con los cursos quiere juntar dinerito. Como son los primeros días, sigues en la nube, emocionada por estar haciendo un curso de algo que te apasiona y todo lo miras con la boca abierta (tal vez el problema lo tenemos nosotras por ser tan pardillas), por eso no atas cabos.
Y empieza la primera clase práctica: el ahumado. Nos dice que ella siempre empieza con el ahumado porque como nos pueden salir prácticas "en cualquier momento", es bueno que sepamos ya maquillar algo complicado para poder salir del paso. Así que ahumado que aprendemos.
Las clases siguen pasando... empezando siempre minutos o incluso una hora más tarde, mientras te ameniza el tiempo con sus críticas a las youtubers, a las bloggers (no entiendo entonces por qué es amiga de tantas) y a alumnas de cursos pasados, o actuales.
En cuanto al material... sí, el primer día había producto de MAC casi en exclusiva... porque ella se está pasando a MUFE, entonces MAC ahora le gusta menos. Pero según pasa el tiempo van acabándose cosas que nunca repone (se pasó los tres meses diciendo que tenía que ir a MAC para comprar las cosas que se habían agotado... y a pesar de ir unas cuantas veces, casi semanalmente, nunca se acordaba de lo que tenía que comprar para la escuela) y apareciendo marcas de peor calidad.
Nunca llevaba nada preparado. Tras la hora de charleta sentaba a una en la silla, se paraba a ver si le venía la inspiración.... y hacía un look. En teoría, cada clase iba a consistir en repetir uno de los looks del día anterior, y hacer dos nuevos. Esto nunca se cumplió y el día que teníamos suerte, hacíamos uno y medio.
Su inspiración se tradujo en ahumados en distintos tonos de marrón, ahumados de pestañas y un par de delineados. Si ves las fotos del curso completo, no eres capaz de distinguir un look de otro. Son todos iguales.
Y los días que no le apetecía inspirarse, nos hacía pruebas... tipo "hazme un look usando 5 colores y 3 técnicas" (cosas que no había hecho ella nunca).
No hace falta decir que ella nunca usa color porque no le gusta. Te explica cómo hacer el contorno o las correcciones para todas las caras igual. Que el visajismo te lo lee el último día de clase. Que mientras maquillas, ella está con el teléfono, el ipad, el ordenador, o explotándose granos o depilándose las cejas.
Sólo cuando habías terminado, te acercabas para que te corrigiera. De pronto te decía varios días seguidos que muy bien, cuando otro te decía que vaya basura de maquillajes llevas una temporada haciendo (¿en qué quedamos?).
Ya desde mitad de curso empieza a ser más insistente con el tema del segundo curso, el que incluye peluquería de plató. Curso por cierto, que te enteras que existe en la primera clase, una vez has pagado el primer mes. Antes de eso, en ningún momento te dice nada. Ahora lo ha cambiado creo que por problemas que ha tenido en cuanto a las horas.
El caso es que empieza a ser cargante con el tema de que sin saber peluquería, no vas a poder maquillar en ningún sitio porque es total y absolutamente imprescindible. Sobra decir que sin el segundo curso, ya las prácticas en televisión pasar de ser seguras a imposibles, porque si piden pelo, tienes que llevar pelo.
Eso sí, durante los tres meses te habla de varios programas de televisión que van a salir........ y cosas de la vida, no sale ninguno.
Desde el principio también se le ve quién le cae bien y quien no. Cómo trata a unas y cómo trata a otras. Si a nosotras nos hablaba mal de la mitad de sus alumnas, a saber lo que habrá dicho de nosotras.
Del temario que publica en su blog, damos la mitad... y de los profesores que dice que van a venir, nada y menos es lo mismo. Y cuando le preguntas por el temario o los profesores que faltan, te dice que hay tiempo de sobra... en el segundo curso. ¿No se supone que ese es el temario del primero?
Y así acaba el curso, habiendo dado ahumados y poco más. Habiendo perdido muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuchas horas de clase en hacer otras cosas que no tienen nada que ver o charlando, sin dar ténicas que ella promete, sin hacer una sola práctica. Habiendo gastado mucho dinero en MAC y MUFE en productos que iban a ser usados a diario y algunos ni has abierto. Eso sí, todos los tickets se los queda ella para luego desgravarse. Con cada vez menos producto en la escuela o repuesto por otros de dudosa marca. Teniendo que llevar todo lo necesario para limpiar y desmaquillar porque no te deja usar el producto que hay allí por si se gasta.
Y sobre todo, acabas el curso con la sensación de haber sido engañada, con un profundo sentimiento de impotencia por no poder decirle las cosas claras porque si no, se enfada, te chilla y te veta. Sin haber logrado si quiera lo mínimo que esperabas del curso: aprender lo que estaba escrito en el programa y tener unas prácticas en TV y revistas. Con la idea de que a pesar de ser buena maquillando, es pésima enseñando. Y no por incapacidad, sino por deseo: nadie va a ser mejor que ella, así que no esperes que te enseñe más allá de un par de cosas básicas.
La única certeza que te llevas de allí una vez acabas, es de haber aportado generosamente a su sueño de poder ir a Miami con el dinero que saca del curso, de las compras de las alumnas y de todo lo que no repone.
Esta ha sido mi experiencia. Muchos meses más tarde sigo sin haber pisado un plató de televisión, y con alguna sesión que otra buscadas por mí misma, en las que en absoluto me piden saber peinar.
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